Ante las afectaciones económicas por la pandemia de covid-19, las compañías del país evitaron el acceso a financiamientos externos, afirmó Gerardo Rojas, socio líder de Asesoría para KPMG México y Centroamérica.
De acuerdo con una encuesta realizada por la consultora a más de 60 directivos de empresas, 59 por ciento de las organizaciones indicó que no recurrió a ningún tipo de apoyo externo.
“Es muy relevante mencionar que este porcentaje refleja la solidez financiera de muchas de las compañías que operan en el país y el buen manejo de capital antes y durante la pandemia”, destacó el directivo.
El indica que del porcentaje que sí tuvo este soporte financiero, 21 por ciento expuso que espera liquidarlo en un plazo de hasta 24 meses; mientras 13 por ciento espera hacerlo entre tres y cinco años.
La encuesta precisa que 87 por ciento de los participantes afirmó que accedió buscará el financiamiento a través de la banca; 8 por ciento eligió un fondo de Capital de Riesgo; 5 por ciento, financiamientos gubernamentales, 21 por ciento, aportación de socios; 3 por ciento, crowdfunding; y 8 por ciento con otro mecanismo.
“El financiamiento y sus condiciones tuvieron que ser endurecidos y ser más restrictivas respecto a lo que se venía manejando anteriormente. El riesgo de crédito en el sector de servicios financieros tendrá un impacto hacia adelante, el cual todavía no podemos alcanzar a ver. Hacia adelante las compañías pueden estar abiertas a generar alianzas estratégicas y esquemas de colaboración con otras compañías”, dijo el especialista.
Expuso que parte de los montos de algunos fondos de capital de riesgo han sido restringidos o no ejercidos en los últimos años por temas geopolíticos.
“Pero a raíz de la pandemia y del reseteo de las estrategias de crecimiento de las compañías, esto va a tener que ser analizado y el punto es que acceder a estas fuentes de financiamiento requiere un análisis más detallado de las compañías como de los posibles inversionistas o fondeadores”, consideró.
Expuso que 28 por ciento de los encuestados dijo que sus ingresos en 2021 crecerán entre uno y 10 por ciento; mientras 16 por ciento espera tener aumentos entre 10 y 20 por ciento.
“Debemos reconocer que 2020 no es referente de una normalidad financiera, de un desempeño normal y no podría compararse con años previos o ser sujeto para la realización de proyecciones. Por ello, al ser un año atípico vimos las perspectivas de los directivos respecto a 2019”, apuntó.
De los encuestados, 45 por ciento indicó que continuará invirtiendo en programas de seguridad y salud y destinarán hasta 1 millón de pesos.
El reporte señala además que 60 por ciento de las organizaciones reconoce estar en un periodo inicial respecto al comercio electrónico; 32 por ciento consideró que se encuentra en un nivel básico o intermedio en el canal de venta digital.
“Cualquier joint venture que se piense hacia adelante tendrá que ver con un componente digital. Podemos ver cómo claramente el tema de la pandemia aceleró toda la conciencia y seguramente todos los esfuerzos para la transformación digital de las compañías, que no solamente tiene que ver con los clientes”, destacó.
Entre los retos que enfrentarán las compañías del país, 51 por ciento señaló que existe un riesgo moderado en cuanto a modificaciones en la cadena de suministro.
“En los últimos meses las cadenas de suministro han tenido que ser diversificadas, es por eso que se ha visto como un riesgo latente que se considera hacia adelante. Han habido casos donde el manejo de los inventarios se ha vuelto muy relevante por la parte logística y la financiera”, finalizó.
AMP
