Ensayar una evaluación de casi cualquier área distinta a la sanitaria resulta poco precisa y acaso injusta debido a la pandemia. Para los resultados magros de cada ámbito ajeno a la atención médica habrá una explicación suficiente, entendible y quizá hasta verosímil, y por partida doble: el contagio y la crisis económica, ambos planetarios.
Con esas justificaciones bajo el brazo, por ejemplo, Alfonso Durazo acudió con gran ánimo a registrar su aspiración a la candidatura de Morena a la gubernatura de Sonora, sonrió y posó ante las cámaras con su documento, como también Layda Sansores en su enésimo intento por ser mandataria de Campeche. ¿Qué importan los resultados de ambos personajes, uno en seguridad federal y la otra en la alcaldía Álvaro Obregón, si la culpa es del virus y la recesión?
Porque pandemia y crisis pueden ser obstáculos mayores para que los servidores públicos cumplan con sus funciones, pero no para que entren en estado de frenesí cuando de buscar otro espacio a costa del erario se trata, época en la que no hay poder humano o natural que los distraiga, es decir, la elección intermedia de 2021. Ahí no existen sana distancia ni penuria económica que valgan, ninguna razón es buena para apartarlos de su cometido.
Sin embargo, aun concediendo que los malos resultados estén determinados por la combinación de virus y recesión, hay funcionarios impresentables como los antes citados y otros que se mantienen en sus cargos, por ahora, verbigracia el titular de la SEP, Esteban Moctezuma, uno de los entusiastas que apenas el año pasado preveía que México alcanzara un sistema educativo tipo Noruega en 24 meses, pero que la plaga le cayó como anillo al dedo, citando al clásico, para justificar el dislate. La proyección sobre Dinamarca hizo escuela.
Basta echar un ojo a los presupuestos para las escuelas normales y los bonos a la CNTE para saber por dónde va el proyecto educativo federal, que nada tiene que ver con el de Noruega ni con el de algún otro país europeo, donde es impensable el subsidio a escuelas rurales cuyos resultados históricos ponen a sus estados en los últimos lugares de aprovechamiento o premios a sindicatos con más bloqueos que días de asistencia a aulas en el año.
@acvilleda