Los peleadores nacidos en México tienen cierta desventaja en el MMA cuando llegan al máximo nivel, pero la brecha se ha recortado y Brandon Moreno es el mejor ejemplo.
El nacido en Tijuana está a horas de converirse en el primer nacido en México en disputar un cinturón indiscutido del UFC y aunque las apuestas están en favor de su rival, el monarca Deiveson Figuereido, Moreno está acostumbrado a remar contra corriente.
«Se les olvida todo lo que he logrado, porque he ganado y he ganado bien. Siempre veo que todos dicen que va a ganar mi rival, hasta en la última donde yo era el número uno del ranking», explicó Moreno en entrevista con La Afición.
El ‘Bebé asesino» comenzó en el MMA a los 12 años cuando su madre Cecilia Carillo lo llevó al gimnasio Entram del coach Raúl Arvizu y 15 años más tarde es el contendiente número uno del UFC.
Proviene de una familia modesta, donde su padre Alfredo se dedicó a hacer piñatas para sacar a la familia y aunque sus dos hermanos, Alfredo (que también es peleador) y su hermana Samantha aportaban en la producción, pero a Brandon no se le daba, el mostraría otros talentos.
«Mis padres, siempre lo he dicho, ellos son mis patrocinadores número uno en esto, por que sin ellos ni de chiste hubiera llegado hasta donde estoy», detalla el mexicano, quien en 2018 fue cortado del UFC y tuvo que pedir prestado para atentender una inusual enfermedad que padeció su hija mayor Madison.
El apoyo del negoció familiar nunca le faltó y se dice afortunado: «Yo siempre digo que yo soy niño fresa, a mí no me falto nada, pero si me tocó ver a mis hermanos mayores que batallaron un poco más, porque mis papás iban empezando con lo de las piñatas», explicó.
Y aunque tuvo techo y comida siempre, la desventaja de enfrentar a los peleadores de los países más desarrollados en las artes marciales mixtas es un reto mayor, incluso, asegura, los tricolores están en desventaja que aquellos que nacen en Estados Unidos pues, «La gente no dimensiona lo que es ser atletas en el tercer mundo. Los peleadores que nacieron en EU, les aplaudo el esfuerzo, pero ellos tienen becas de lucha desde la primaria hasta la universidad. A mí me aventaban un balón para que jugara, el maestro de educación física era un gordito y nadamás nos decía, ahi dale».
Moreno enfrenta este sábado al campeón Figuereido en el estelar de UFC 256 y busca extender una racha de cinco peleas sin derrota desde junio del 2019.
