Una sonda china con rocas y arena de la Luna descendió en la Tierra este jueves y completó una misión que no se había realizado en cuatro décadas, informó la agencia de noticias estatal Xinhua.
El módulo de la nave espacial Chang’e-5 aterrizó en la región de Mongolia Interior, en el norte de China, informó la agencia espacial de ese país, citada por Xinhua.
El descenso de la sonda Chang’e en el distrito de Siziwang de la vasta región de Mongolia Interior estaba prevista por la noche del miércoles o el jueves por la madrugada. La recuperación de la sonda se vio en dificultad por su pequeño tamaño, la oscuridad y la nevada intensa, informó la prensa estatal.
Según el plan, inicialmente debe rebotar en la atmósfera para reducir su velocidad antes de atravesarla y descender con paracaídas, lo cual no permite calcular con exactitud el lugar del descenso, dijo Bian Hancheng, jefe de la tripulación de recuperación, a la agencia noticiosa oficial Xinhua.
La emisora estatal CCTV mostró cuatro helicópteros militares preparados en una base en los pastizales cubiertos de nieve. Las tripulaciones en tierra tratarán de ubicar las señales. Aunque es enorme, la zona es conocida porque se la utiliza para el aterrizaje de las naves espaciales tripuladas Shenzhou.
Chang’e 5 descendió sobre la luna el 1 de diciembre para recoger material de la superficie y también de dos metros por debajo.
grb
