Para el joven piloto poblano Mariano del Castillo, lograr el sueño de correr en las máximas categorías del automovilismo ha representado un auténtico reto.
Pese a contar con la habilidad, el apoyo de su padre y con infinidad de logros nacionales y estatales con apenas 20 años, el también estudiante de la licenciatura en Negocios Internacionales asegura que el factor económico ha representado un obstáculo en su trayectoria.
En entrevista con MILENIO Puebla, el tricampeón estatal de karts, campeón de la Fórmula México (Latam F2000) en 2018, y quien en ese mismo año hizo una fecha con Nicholas Lafiti, piloto de la escudería Williams de Fórmula 1, cuenta cómo ha sido su vida dentro y fuera de las pistas.
¿Cómo fueron tus inicios en el automovilismo?
“Pasó mucho tiempo desde que me decidí hasta que empecé, porque cuando yo tenía 4 años veía la Fórmula 1 con mi papá, veía a Fernando Alonso, Michael Schumacher, y me encantó. Desde ahí me empezó a llamar la atención aunque no lo practicaba por falta de dinero. A lo largo de mi vida fui creciendo y jugué otros deportes como futbol americano, futbol soccer y baloncesto. En 2014 hubo una oportunidad para empezar a correr, la tomé y fue muy difícil porque no tenía nada de experiencia, pero me ayudó mucho a convertirme en el piloto y la persona que soy hoy”.
¿Cómo se dio tu paso del kartismo a la Fórmula 4?
“Fue complicado por el presupuesto, desafortunadamente en este deporte dependes mucho del dinero, en 2017 pudimos hacer una carrera que no nos fue tan bien porque tuvimos algunas fallas en el coche, pero la realizamos porque conseguimos apoyo para esa carrera, para el resto de la temporada fue muy difícil y fue la única carrera que pudimos hacer. El único obstáculo que he tenido es el económico, pero de ahí se derivan muchos; en los karts, al principio no tenía auto, tenía que rentar un coche, después tuve un kart muy viejito al que se le rompió el chasis varias veces, no tenía mecánico y a veces iba un poco a ciegas. La falta de esas herramientas en un principio me hicieron mucha falta y me obligaron a maximizar cualquier oportunidad”.
¿Quién ha sido tu apoyo más importante?
“Mi papá es el que siempre ha estado ahí, además de ser el proveedor económico era el que estaba en las carreras, no había agente de publicidad pero él ahí estaba tomando fotos. También ha habido muchas personas que han hecho posible que haya competido en tantos lugares, como Erick de la Vega, el dueño del equipo con el que yo corrí en 2018 en la Fórmula México”.
¿Qué pasa por tu mente antes de una carrera?
“Soy un poco supersticioso, desde antes de subir yo tenía una rutina muy bien marcada, de cómo hacer las cosas, cómo ponerme el casco, de qué lado subirme al coche. Desde antes de subir era como si estuviera meditando, debe haber mucha calma, vivir el momento al cien por ciento, e incluso ir manejando era un sentimiento parecido. En ninguna otra actividad o lugar he tenido ese sentimiento”.
¿Quién es tu máximo ídolo?
“Admiro muchas cosas de muchos pilotos y atletas, me gusta mucho el espíritu y la competencia de Ayrton Senna, la naturalidad con la que hacía las cosas Jim Clark, el ver todas las circunstancias en las que yo corrí y ver que los mexicanos están un poquito lejos de los demás de llegar a Fórmula 1, para mí ‘Checo’ Pérez es un gran ejemplo. Fuera de las carreras admiro mucho a Muhammad Ali, su temple y su disciplina”.
¿Cuáles son tus pasatiempos?
“Me gusta hacer lo mismo que hago en las pistas pero en el simulador, me gusta andar en bici, salir a caminar al parque, me gusta leer y hacer cosas manuales. Estoy empezando un negocio con un amigo de autos de carreras, de decoración, la artesanía me gusta mucho”.
¿Cómo has sobrellevado la pandemia?
“En mi caso, acabo de empezar la universidad en enero, haber ido unos meses a la escuela y luego con la pandemia regresarte a tu casa ha sido un poco difícil, he logrado sacarle el lado bueno, aprender cosas nuevas, llevarme con personas diferentes y aprovechar el tiempo. No he corrido últimamente por la falta de apoyo económico, pero no ha sido fácil. Es algo de lo que todos tenemos que aprender, independientemente de la personas que seas”.
¿Cuál es el sueño de Mariano del Castillo?
“Me encantaría llegar a ser piloto profesional, ha sido un momento difícil para mi carrera, sin embargo estoy convencido de que tengo la habilidad y estoy seguro de que saldrá una oportunidad importante para mí. En el lado personal, me gustaría terminar mi carrera de Negocios Internacionales, emprender algún negocio que mejore la vida de las personas, les brinde una motivación. Me encanta mi país y me encantaría en algún momento exportar artesanías mexicanas, de nuestra identidad, es algo que quiero hacer, generar un beneficio para la sociedad”, finalizó.
mpl