Por: Mario Alberto Benavides Lara y Víctor Jesús Rendón Cazales
Ilustración: Estelí Meza, cortesía de Nexos
Ante la situación que atravesamos, muchos de los controles y procesos establecidos en las instituciones escolares han dejado de ser funcionales, sino es que ya no lo eran. Esto ha dado pie a que las y los docentes echen mano de su experiencia y pericia para continuar sus labores: algunas veces basados en la tradición; otras, apoyados en procesos emergentes de formación profesional. Pero también ha habido muestras de creatividad e iniciativas individuales y colectivas que plantean nuevas formas de hacer la escuela. De ahí que nos encontremos en un momento crucial para reflexionar las rutinas escolares, las formas de relación y participación entre las y los docentes y sus estudiantes, así como las maneras de integrar las propiedades posibilitadoras de las tecnologías digitales en los procesos educativos, que pueden ser muchas y esperanzadoras si entendemos a la educación como un proceso multimodal.