El director del IMSS, Zoé Robledo, aseguró que, históricamente, esa institución de salud nunca ha fallado y siempre ha estado al frente ante las catástrofes y la pandemia por el covid-19 no será la excepción.
“El IMSS nunca ha fallado y está ahí cuando se le necesita, ya sea un temblor, una pandemia como la de 2009 (influenza), entonces no lo podemos hacer ahora”, dijo.
Durante El asalto a la razón, en MILENIO Televisión, con Carlos Marín, aclaró que si bien queda mucho por analizar sobre la actuación del IMSS ante el coronavirus, “para haber logrado una reconversión tan profunda y estar atendiendo desde hace varios meses a más de la mitad de los pacientes hospitalizados por covid del país, ha sido una carga grande que asumimos, porque es lo correcto y esto está a la altura de la historia del Seguro Social.
“El seguro tienen un universo potencial de derechohabientes que alcanza los 70 millones, que si le sumamos los 13 millones que se atienden en el IMSS-Bienestar, estamos hablando de poco más de 80 millones, es decir, la mitad de la atención médica que recibe la población del país”.
Sobre si los pacientes con covid -19 que ingresan corren mayor riesgo de fallecer si son intubados, explicó que hay “tres razones fundamentales” que se han estudiado o analizado y para las que, incluso, buscó a varias instituciones internacionales “para que nos hagan un estudio”.
Puntualizó que, en primer lugar, el derechohabiente tiene niveles de comorbilidades más altos que el resto de la población y “destacadamente más altos que aquellos que se atienden en hospitales privados”.
El segundo factor, dijo, es el control de la enfermedad, ya que una persona que se atiende en un hospital privado tiene un mayor control sobre la misma, de manera que “la desigualdad juega muchísimo” en el resultado del tratamiento.
“Un paciente con diabetes que es atendido en un hospital privado muchas veces tiene un control más grande en su enfermedad, y no porque ambos tengan los medicamentos, sino porque son enfermedades que para controlarlas juegan un papel importante”.
El tercer factor corresponde a los largos periodos que se dejan entre el momento en que una persona comienza a sentir síntomas y en el que ingresa a un hospital.
Aseveró que uno de los gastos más importantes de 2020 fue el de los bonos y notas de mérito al personal de salud, estímulos entregados a quienes cambiaban de hospitales, horario, o que incluso cambiaran de estado.
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