La campaña de censura y latente fustigamiento en contra del Instituto Nacional Electoral (INE) que le endosa todos los días el presidente López Obrador, empieza ya a causar estragos y resentimientos entre la fanaticada de Morena y el resto de partidos opositores al régimen, de cara al proceso del próximo 6 de junio de este 2021.
Y es que el Jefe del Ejecutivo persiste en violentar el marco legal porque no ha querido dejar de ser el ariete activo de Morena, toda vez que sabe que podría perder la mayoría en el Congreso de la Unión por la serie de omisiones que ha cometido en el desarrollo de programas de índole prioritario y que no ha cumplido en los dos primeros años de su administración.
Nadie puede negar el abierto desafío del presidente López Obrador con los reclamos públicos al director del INE, Lorenzo Córdova, sobre las decisiones de ese Instituto acerca de que el mandatario tendrá que acatar la ley cuando entren de lleno las campañas para renovar la Cámara baja y en la que por mandato de ley no podrá hacer más proselitismo en favor de Morena.
De igual forma, el INE tendrá que enfrentar el activismo político de AMLO que violenta la ley una y otra vez, ya que el Jefe del Ejecutivo no desea cumplir con los preceptos constitucionales, así de manera sencilla, porque está acostumbrado a ir en contra de lo establecido ya que así es su naturaleza.
Para ningún protagonista de la esfera política nacional es desconocido qué con la actitud adoptada por López Obrador, se acrecentarán cada vez más los riesgos de conflictos postelectorales, a grado tal, que muchos insurrectos persistirán en seguir su ejemplo el que sin duda generará una mayor incertidumbre jurídica.
En definitiva, las pugnas y la actitud desafiante del mandatario mexicano hacia las instituciones autónomas comenzó ya, debido a que con las acres y críticas ácidas a Córdova y al INE que encabeza, permanecerán hasta en el tiempo de veda política porque el tabasqueño no quiere acatar el marco legal
A ese respecto, el consejero presidente del INE advirtió a los dichos de AMLO que quiera o no, el 4 de abril deberá suspender la transmisión íntegra de sus ya cotidianas conferencias mañaneras de AMLO en todo el país, porque ese día arrancan de forma oficial las campañas federales y las conferencias que ofrece todos los días el mandatario desde Palacio Nacional son propaganda gubernamental.
Nuestra Constitución prohíbe su difusión durante las campañas salvo excepciones con temas de trascendencia de salud, como el que hoy enfrentamos, la de la Covid-19, así como la de educación y protección civil.
Así con esos antecedentes que conoce a profundidad López Obrador, no le sorprendió la advertencia del órgano electoral. De inmediato le contestó. Le reviró y arremetió contra el presidente del INE, a quien de paso lo acusó de querer censurarlo y atentar contra su derecho a informar al pueblo.
El Jefe del Ejecutivo externó que de persistir las prohibiciones de Lorenzo Córdova a sus mensajes a los mexicanos, acudirá a las instancias judiciales en el caso de su reincidencia, ya que sería un acto de censura, un agravio, un atentado a la libertad el suspender la difusión de las mañaneras.
Y para coronar sus dichos en contra del dirigente del Instituto Nacional Electoral, López Obrador convocó a los mexicanos “a que opinen si está bien que el INE nos silencie. Si está bien que en México el presidente no pueda hablar o no pueda informar. Eso si es un atentado al estado de derecho de la nación. Y por supuesto, puntualizó, no lo permitirá.