Un juez federal concedió una suspensión provisional en un tramo de la construcción del Tren Maya en los municipios de Chocholá, Mérida e Izamal, en Yucatán, por lo cual el gobierno quedará impedido de ejecutar nuevas obras, mientras se decide si procede la suspensión definitiva del próximo 27 de enero.
¿Qué ocurrió? El amparo fue promovido por el colectivo Kanan Derechos Humanos, en julio pasado en contra de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), pues indicaron que no se dio información sobre las especies en riesgo y las afectaciones ambientales al realizar la consulta ciudadana sobre la construcción del proyecto.
Por su parte la Semarnat aprobó la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) del Tren Maya, por lo cual ya se podrían ejecutar las obras, pese a que se reconoció que no se puso a disposición toda la información durante la consulta, ante lo cual el amparo se amplió
“Ambas autoridades están demandadas como corresponsables al incumplir con sus obligaciones para la protección del medio ambiente, la transparencia, acceso a la información y participación pública durante el proceso de consulta al público”, indicó Roberto Sánchez Campos, abogado del colectivo.