El exgobernador de Puebla, Mario Marín, solicitó seguir su proceso en arraigo domiciliario, alegando padecimiento en el riñón y riesgo de contagio de COVID-19 al interior del Cereso y su edad avanzada. Sin embargo, dicha petición le fue denegada por el juez.
Los detalles. Por cierto, durante su audiencia inicial en la sede del Poder Judicial de Quintana Roo, Marín se reservó su derecho a declarar, además solicitó que se ampliara el término constitucional de 72 a 144 horas para que se defina su situación jurídica.
Contexto. Mario Marín, conocido como «el góber precioso«, fue detenido el 3 de febrero en Acapulco, Guerrero, luego de estar prófugo, se presume su participación en una red de pederastas, además de la tortura a la periodista Lydia Cacho, quien celebró su captura con esta frase: «Llevo 14 años esperando justicia».