El actor Cesáreo Quezadas, mejor conocido como Pulgarcito, fue puesto en libertad tras pasar 19 años en el Centro de Readaptación Social de Mérida (CERESO), acusado de abusar sexualmente de su hija, Mariana.
El 30 de abril de 2002 fue condenado a 20 años de prisión, luego de que su segunda esposa, Claudia Burgos, lo denunciara ante las autoridades tras presuntamente encontrar un video de Quezadas protagonizando el delito. Su periodo en la cárcel terminaría hasta abril de 2022, pero obtuvo su liberación por su avanzada edad, tres meses después de cumplir 70 años.
A casi dos décadas de su ingreso, sigue defendiendo su inocencia y asegura no guardar rencor a quienes los señalaron en el pasado e incluso estar dispuesto a retomar su relación con sus hijas.
«Ellas ya están haciendo sus vidas. Yo las amo, y las quiero, el día que ellas me busquen, incluso me vinieron a ver al penal al principio mucho, pero las mamás creo que influyeron, les molestaba. El hecho es que si yo le debía algo a la sociedad ya lo cumplí hasta de más. El rencor, la envidia y los sentimientos negativos, el odio, creo que le hacen más daño a quien lo siente, que a los que lo provocan», dijo en Entrevista con Sale el Sol.
El protagonista de Las aventuras de Joselito y Pulgarcito (1960) explicó que lo más valioso para él era reencontrarse con su madre, pues ella nunca perdió la fe de verlo.
«Ahorita que ya recuperé parte de la libertad, me siento mejor, alegre, sobre todo de ver a mi madre. Tiene 96 años y venció al covid. Sólo las madres son más asiduas a no abandonar, por muy música que sea el hijo, muy chueco que sea el camino que haya tomado. Las madres son algo único, no todas, la gran mayoría, a mi me tocó la mejor madre del mundo, así lo pienso y así lo ven mis hermanas. Ella no quería irse de este mundo hasta no verme fuera», relató.
BGHL
