Hace más de un año que la pandemia empezó a hacer estragos en nuestro país, se ha llevado el covid-19 a muchos seres queridos, a amigos, vecinos y a otros tantos los ha dejado afectados física y emocionalmente.
Muchos negocios tuvieron que cerrar, además el desempleo se hizo presente, mientras que muchos pese a temer a los contagios, no dejaron de salir a las calles, a los cruceros, para seguir vendiendo sus productos y tener algo que llevar a sus casas.
Son demasiadas cosas las que han pasado, pero lo más preocupante fue el suspender las clases escolares presenciales por las virtuales.
Se puede decir que fue el inicio de un programa para que los niños y jóvenes no perdieran el año escolar, pero en la realidad ha sido demasiado difícil para muchos estudiantes.
En estos momentos ya se habla de un posible regreso a las aulas, pero poco se dice sobre el nivel académico de muchos niños, ya que hay sectores vulnerables en los cuales no se cuenta con equipo de cómputo o con internet y son quienes viven en esos lugares los que sufren.
Se sabe que hay familias en las que se cuenta con alguna lap top, una ipad o un teléfono celular y en esos aparatos los pequeños pueden estar recibiendo sus clases.
Pero qué hacen los más pobres, quienes pareciera que se encuentran en el olvido, ya que sus padres apenas tienen dinero para comprar alimentos, pero difícilmente para comprar una computadora o un televisor.
Hay muchas quejas contra los programas que se implementaron, los cuales muchos alumnos no entienden, pero muchos otros cuentan con el apoyo de terceros como lo son hermanos, tíos o hasta los mismos padres de familia.
En muchas instituciones públicas y privadas, han utilizado las aplicaciones gratuitas como zoom o meet, pero están condicionadas a solamente 40 minutos y en ese tiempo es difícil entender una materia.
Ojalá que las autoridades educativas tanto de la federación como de los estados, se preocupen más en ver cómo se encuentran los pequeños a estas alturas del ciclo escolar, antes de pensar en el regreso a clases.
Es un año atípico, ya se habla de que muchos estudiantes lo perderán o mejor, por culpar a la pandemia, todos, pero todos habrán de pasar al siguiente nivel.